Guerrera~

Guerrera curtida en mil batallas. Aliada de ricos y pobres, aliada hasta de enemigos, en ciertos momentos, para llegar a conseguir su fin.
Ahora, vienen todos a atacarla, pero no saben a lo que se están enfrentando. Tiene mil cicatrices de guerra, novecientas noventa y nueve por victorias, una por derrota. La primera y única derrota, tras la que pudo hacerse con todo lo necesario para ganar las siguientes.
Una coraza, resistente como el acero, pero ligera como la brisa; un yelmo, acolchado por su pelo ardiente; un gran escudo, hechos de las trizas de una embarcación antigua; y una espada, forjada con el hierro de la mejor calidad, que blande con mayor destreza a cada batalla que pasa.

Ha escapado de emboscadas, de falsos curanderos, de quienes la asaltaban por el camino en solitario.

Ahora, cuando la ven llegar, imbatible, temeraria, sagaz, pocos se giran siquiera a mirarla. Da miedo ver aquella sombra del pasado. Da miedo su forma de dejar caer el escudo sobre la mesa.
Quién lo diría, siendo tan pequeña y puede caminar con todo aquello.

Olvidaba contaros sobre su muro. Muchos lo conocen, pocos lo atraviesan.
Cada batalla hace que ella reconstruya el muro, que lo haga con más piedras, más duras, mejor colocadas y dé mayor altura a las paredes que la guardan.
Nunca nadie ha sido tan osado de derribarlo por completo, sólo pueden intentar que les dé cobijo a su lado, pagando el precio de dejar sus armas fuera.

Ella es más valiente que cualquier otro guerrero, porque nunca ha tenido la ventaja de que alguien creyera en ella. Consiguió valerse por sí misma y vencer tras ser vencida. Ella es mejor que cualquier otro. Ella es ella.